IMPULSO/ Redacción
Toluca
Investigadores del Centro Universitario Texcoco de la Universidad Autónoma del Estado de México llevaron a cabo un estudio sobre el Mexibús, el cual se enfoca en cuatro secciones: discusión “teórica” respecto a la movilidad urbana y las políticas, experiencias internacionales, efectos no esperados del Mexibús y, finalmente, La percepción de la población.
Melesio Rivero Hernández y Camelia Ariadna Martínez Fragoso aseguraron que los efectos no esperados tienen que ver con problemas de diseño e implementación del modelo.
En la investigación titulada “Efectos no esperados del Mexibus. Línea Ojo de Agua-Ciudad Azteca”, los universitarios explicaron que ésta da continuidad a un estudio previo que resaltó los aspectos positivos percibidos por la población en torno a la nueva modalidad de movilidad urbana en el Valle de México o Mexibus; sin embargo, precisaron la necesidad de abundar y conocer aquellos efectos negativos, esto con el objetivo de generar propuestas viables.
En esta ocasión, dijeron, se hizo una evaluación de posibles efectos negativos en la infraestructura vial, que tienen que ver con la circulación de vehículos y personas, enfocándose en observar aspectos como la falta de control vial cotidiano, la ausencia de la autoridad para controlar invasiones del carril confinado y limitar la circulación de forma paralela al carril del Mexibus por parte de las unidades de transporte público tradicionales, entre otros problemas.
Lo que se logró, advirtieron, es recopilar información de campo mediante la aplicación de las técnicas de observación de campo y encuesta, a partir de las cuales se tendrán elementos de diagnóstico de los errores de implementación y los efectos no esperados. En base a estos datos, se podrán desarrollar alternativas de solución.
