IMPULSO/Arturo Albíter Mtz
Artículo
Lo que se perfilaba para ser un gran bloque opositor en la Legislatura podría verse disminuido por luchas internas
– Lo que se perfilaba para ser un gran bloque opositor en la Legislatura, para beneplácito del PRI, podría verse disminuido debido a las luchas internas de la alianza ganadora.
– Era un hecho “cantado”, Maurilio Hernández y el GAP van a acaparar las principales comisiones.
– El que fuera candidato priista en Ixtlahuaca, Juan Carlos Bautista, no logra digerir la derrota y culpa a otras estructuras de lo sucedido, sin darse cuenta de que tuvo un pésimo desempeño como edil.
Con los resultados electorales y subsecuente conformación de la próxima Legislatura, el escenario para el Partido Revolucionario Institucional y para el mandatario estatal lucía desastroso, mucho se comentaba sobre el perfil que debía tener el líder de la bancada para poder negociar acuerdos.
Había comentado hace algunas semanas que el Tricolor debía aprender a ser oposición en la Cámara y que los que en otro momento fueron partidos minoritarios debían entender lo que era trabajar con una gran mayoría.
Pues todo parece indicar que, en Morena, las cosas no han salido de la mejor forma, ya que no han podido superar el enfrentamiento entre grupos. Por un lado, Higinio Martínez y su GAP, por el otro, los que no están de acuerdo con el dominio total de esa corriente en la toma de decisiones.
Así que todo parece indicar que Maurilio Hernández será el líder de la fracción de Morena y repartirá las principales comisiones entre los diputados que simpatizan con el GAP. Por otro lado, se encuentran los Ulloa y Daniel Serrano, aunque, en un principio, también se encontraba en este bando Max Correa, pero finalmente cambió de bandera en los últimos días y se alió al GAP.
El caso de Max Correa, que como muchos perredistas se cambió a Morena cuando no le cumplieron sus caprichos, ahora se encuentra trabajando de lleno, sobre todo en el Valle de Toluca, prometiendo apoyos a “diestra y siniestra” en cuanto llegue a la Cámara de Diputados, ello con el objetivo de ganar el favor de los consejeros que formarán parte de la Asamblea de Morena, que serán elegidos a finales de septiembre o principios de octubre.
Así que las cosas al interior de Morena apuntan a que no van a tener acuerdos que dejen satisfechas a las dos partes, por lo que, sin renunciar al partido, es muy probable que los opositores al GAP no estén de acuerdo con todos planteamientos que intente posicionar Morena en la Legislatura.
Por otro lado, el Partido del Trabajo, cuyo eterno líder es Óscar González, también ha dejado ver que no será un incondicional de Morena al momento de tomar decisiones, esto sin contar con el hecho de su aparente fama de portarse bien con los priistas.
En lo que se refiere al PES, tampoco se han tomado acuerdos definitivos en el sentido de apoyar en todo momento a Morena.
Si a lo anterior se suma el PRI y lo poco que tengan otras expresiones, las fuerzas pueden nivelarse en el Congreso, lo cual sería una gran noticia para el mandatario estatal.
Es cierto que todavía le falta mucho tiempo a la conformación de la nueva Legislatura, pero, al menos mediáticamente, los de Morena/GAP actúan como si ya ostentaran el cargo, cuando todavía les falta poco más de 50 días para tomar protesta, sobre todo cuando están muy lejos de unirse para formar un verdadero bloque opositor al Gobierno estatal.
No se sabe cómo estarán en septiembre, pero, por el momento, lo que parecía ser un gran bloque opositor se está convirtiendo en un bloque que no tendrá el control absoluto y cada quien buscará privilegiar los intereses de su grupo, por encima de lo que fue su alianza, algo que un buen estratega priista deberá aprovechar sin lugar a dudas.
El que fuera candidato priista en Ixtlahuaca, Juan Carlos Bautista, no logra digerir la derrota y culpa a otras estructuras de lo sucedido, sin darse cuenta de que tuvo un pésimo desempeño como edil
El que fuera candidato del PRI a presidente municipal por Ixtlahuaca, Juan Carlos Bautista, está que no lo calienta ni el sol luego de la estrepitosa derrota que sufrió en las pasadas elecciones. Ya de nuevo en su cargo, para cobrar las últimas quincenas, se la pasa acusando a todos los que de alguna forma formaron parte del equipo de campaña.
Al señor le ha parecido más sencillo culpar a otros, sin detenerse y hacer una autocrítica; lo cierto es que, durante tres años, el señor Bautista no hizo otra cosa que hacer enojar a la población de aquel municipio.
Siempre con una actitud prepotente, lo mismo que algunos de sus más cercanos colaboradores, Juan Carlos Bautista hizo lo necesario durante dos años para abonar a esta derrota. Lo peor es que ahora quiera culpar a otros de sus malos actos. Ya hablaremos más a fondo del tema Ixtlahuaca.