IMPULSO/Carlos Guitián Berniser
Una ejemplar transnacional mexicana
Bimbo es una empresa trasnacional mexicana y la más grande en el mundo en materia de fabricación de pan, con operaciones en América, Asia, África y Europa. Opera las panaderías más grandes en los EE.UU., México, Canadá, Chile y España, y tiene algunas de las redes de distribución más amplias en México y los Estados Unidos.
También fue la novena compañía más grande de México en 2013 y la segunda empresa mexicana que más ventas reportó en los Estados Unidos en 2017. Bimbo reportó ingresos de USD $13.4 mil millones en 2016 y, actualmente, la empresa tiene más de 137 mil empleados, 195 plantas de fabricación, además de tres comercializadoras y ocho asociadas estratégicas; también cuenta con mil 800 centros de ventas en México y 3 mil alrededor del mundo, ubicados en 32 países en América, Europa, Asia y África.
Opera también más de 100 marcas registradas (que producen más de 13 mil productos), entre las que se encuentran Bimbo, Tía Rosa, Marinela, Wonder (solo en México), Barcel , Sara Lee, Mrs. Baird’s, Oroweat, etc. Bimbo tiene una de las redes de distribución más amplias del mundo, superando las 57 mil rutas.
Por eso llama la atención que haya recibido el pasado viernes, por parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), el reconocimiento de “Empresa Segura” para la Planta Suandy , ubicada en el Municipio de Lerma, Estado de México.
Bimbo se unió en 2006 al Programa Autogestión en Seguridad y Salud en el Trabajo (PASST), con el objetivo de salvaguardar el bienestar de quienes trabajan en la compañía. En 2015, firmó un Convenio de Concertación con la STPS, a fin de comprometer la inscripción de todas sus plantas del país al Programa.
Desde entonces, 28 centros de trabajo se han sumado al mismo, en los que laboran más de 10 mil personas y de éstos, 11 cuentan ya con el reconocimiento de “Empresa Segura”.
Uno de los factores que valora la STPS para otorgar este reconocimiento, es la tasa de accidentabilidad, la cual debe tener un máximo de 0.73 accidentes por cada 100 colaboradores.
En el caso de Bimbo, se ha logrado obtener una tasa por debajo de este valor, con 0.40 accidentes por cada 100 colaboradores. En este sentido, y en su camino por consolidar una cultura de la seguridad entre todos sus colaboradores, el compromiso es que para el 2020 la totalidad de sus centros de trabajo estén inscritos en el Programa.
El Modelo de Seguridad de Bimbo refuerza los principales objetivos en esta materia: lograr cero accidentes y consolidar día con día una cultura de seguridad. Esto se logra a partir de acciones como corregir actos o condiciones inseguras, informar a todos los colaboradores sobre los riesgos en sus estaciones de trabajo, promover esquemas de autoevaluación de cumplimiento, identificando riesgos y estableciendo mejoras continuas para evitar accidentes, además de intercambiar constantemente buenas prácticas con distintos actores.
Asimismo, se busca el desarrollo y bienestar de las personas implementando campañas de prevención de enfermedades, contando con espacios designados a la actividad física y la certificación de comedores balanceados dentro de sus centros de trabajo, impulsando programas que motivan a los colaboradores a adoptar estilos de vida saludables.
De esta manera, la panificadora más importante del mundo continúa reforzando su Modelo de Seguridad, a través de un enfoque ético para cuidar el bienestar de todos quienes colaboran en la empresa, tal y como siempre lo planteó Lorenzo Servitje, que en 2013 recibió un homenaje a su trayectoria como líder ejemplar y por ser uno de los grandes empresarios mexicanos que cambiaron la forma de hacer negocios en México, otorgado durante el World Business Forum, donde por cierto Servitje dictó cátedra a empresarios sobre los valores y responsabilidades que tienen tanto con sus empresas, como con sus trabajadores y su comunidad.
