IMPULSO/ Agencia SUN
Michoacán
A nueve meses de que Diego Fernández Quintero, de 19 años, originario de Uruapan, fue detenido y encarcelado en Beijing, China, presuntamente por golpear al vigilante de una escuela, aún no se define su situación jurídica.
La madre del joven, Blanca Yolanda Quintero Sánchez, relató a EL UNIVERSAL que el caso está detenido a pesar de que con el apoyo del gobierno de Michoacán y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) se contrató a un abogado de origen chino, a quien incluso ya se le entregó 60% del costo total de lo que cobrará por la defensa.
Quintero afirmó que el abogado asiático ya se puso en contacto con ellos, “pero no ha iniciado hasta ahora ningún trámite relacionado al juicio. Pretexta cúmulo de trabajo, lo que me llena de tristeza, sobre todo al saber que tomó una responsabilidad que no ha cumplido”.
A principios de 2017, los hermanos Diego y Alejandro (21 años) Fernández Quintero viajaron a Beijing, China, contratados para dar clases de inglés, “bajo engaños”, por la empresa Zhirui Hudong International, ligada en intercambio cultural a la Universidad de Harvard.
El 2 de abril, Diego fue detenido, acusado de lesiones por violencia y de golpear a una persona de la tercera edad, delito muy penado en ese país. Con él permanece Alejandro, en espera de que se defina la situación jurídica de su hermano.
Yolanda denunció que la familia ha escondido al vigilante agredido y no han permitido a la representatividad legal corroborar si realmente “está en las condiciones físicas que refiere en su acusación”.
