IMPULSO/Gabriela Landetta
Toluca
En esta época del año es común que aumenten los casos de depresión, sobre todo en personas de entre 20 y 40 años de edad, lo cual tiene que ver con el clima, ya que, al sentirse menos calor, la melatonina -hormona- y la serotonina -neurotransmisor responsable de mantener en equilibrio el estado de ánimo- se ven afectadas, provocando tristeza o mucho sueño, situación que puede agravarse en caso de tener alguna enfermedad crónica o problemas económicos o emocionales.
Víctor Torres Meza, director general del Centro Estatal de Vigilancia Epidemiológica y Control de Enfermedades, CEVECE, informó que, en promedio, se registran 669 suicidios anualmente de población joven y alrededor de un cinco por ciento de intentos o de suicidios consumados tienen que ver con la depresión invernal.
Por ello, dijo que es importante que la familia identifique los principales síntomas de la enfermedad, como el hecho de que el paciente no quiera participar en reuniones o tenga problemas de dolor de cabeza o que observen algunas otras circunstancias que permitan sospechar de un caso depresivo, ante lo cual es importante llevar a la persona al médico y también motivarla a que realice alguna actividad física para que con el calor pueda reactivar las sustancias antes mencionadas y empezar a resolver la situación.
Informó además que la tendencia depresiva en esta temporada es de dos mujeres por cada hombre, situación que está relacionada con el aspecto hormonal. En el caso de los niños, lo que se presenta es ansiedad sobre todo. “Es una circunstancia distinta. Aquí hay un poco la situación de enojo o molestia cuando lo que pidieron como regalo no fue lo que les trajeron. Hay una expectativa que no siempre se cumple”, finalizó Torres Meza.
