IMPULSO/ Agencia SUN
Oaxaca, Oax.
Si no hubiera nacido en Michoacán, a Rogelio Naranjo le gustaría ser de Oaxaca, o al menos ser michoacano y oaxaqueño, por eso el homenaje que le rindió esta ciudad a través de la Feria Internacional del Libro con una mesa de diálogo y dos exposiciones de sus cartones, fueron el mejor tributo a una trayectoria que supera el medio siglo de trabajo creativo y crítico.
El cartonista y editorialista de EL UNIVERSAL recorrió con emoción, como si fuera la primera vez, la exposición “Naranjo. Vivir en la raya”, que exhibe 203 de sus cartones organizados en 9 temáticas que van desde las mujeres y el erotismo, hasta las letras, los retratos y los políticos. Esta muestra que ayer fue inaugurada en el Centro de las Artes de San Agustín (CaSa) da cuenta de una pequeña parte de la colección que el artista entregó al Centro Cultural Universitario Tlatelolco de la UNAM.
Durante la inauguración encabezada por el propio Naranjo, quien estuvo acompañado de Lourdes Báez, directora del CaSa; Guillermo Quijas, presidente de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca y director de la Editorial Almadía, los asistentes pudieron disfrutar del arte de Naranjo, de humor y crítica, en una pequeña selección de la misma exposición que se montó en 2013, en el Centro cultural Universitario Tlatelolco, que expuso más de 500 piezas, incluso objetos personales.
El caricaturista Darío Castillejos aseguró que esta muestra que permanecerá abierta hasta el 21 de noviembre permitirá a los asistentes entrar a la intimidad de Rogelio y podrán descubrir las múltiples facetas de su trabajo artístico.
“Cada artista tiene su particular manera de expresar su visión del mundo que le rodea. Rogelio Naranjo lo ha hecho con un trazo puntilloso y contundente para revelar su visión del poder de la política y la grandeza de la imaginación. Para lanzar dardos claros y certeros contra caciques, empresarios, políticos y personajes presos de corruptelas e indiferencia”, señala el texto de sala.
Por la tarde, el cartonista estuvo presente en un encuentro de moneros, entre los que se encontraba su amigo de toda la vida, Rius, así como Darío Castillejos, donde hablaron del cartón en México y reiteraron la importancia de la figura de Rogelio Naranjo, la calidad de su trazo y la habilidad con la que ha retratado a los políticos, la corrupción, la muerte, la desigualdad, la pobreza y a toda la realidad mexicana.
En el marco del encuentro, el cartonista homenajeado estuvo presente en la inauguración de la segunda exposición de su obra, en el Museo Belber Jiménez. Allí, rodeado de sus pares que para redoblar el tributo vistieron una playera blanca con el retrato de Naranjo hecho por Alejandro Magallanes, se inauguró la muestra “A ti te hablo. 100 caricaturas de Rogelio Naranjo”.
