IMPULSO/Redacción
Toluca
La Galería Universitaria “Fernando Cano” de esta casa de estudios es sede del Primer Festival Internacional de Conciencia Sonora.
Para dar cuenta de la relevancia de los sonidos que se presentan en el entorno, así como generar un espacio de escucha, la Universidad Autónoma del Estado de México lleva a cabo en la Galería Universitaria “Fernando Cano” el Primer Festival Internacional de Conciencia Sonora, cuyo programa contempla más de 30 actividades que tienen como propósito vincular la ciencia con el arte.
Organizado por la Secretaría de Difusión Cultural de la UAEM, en coordinación con diversos organismos académicos de la institución, este encuentro contribuye a la apreciación estética sonora y a reflexionar acerca de cómo los sonidos afectan la dimensión biopsicosocial de las personas, manifestó el titular de la Dirección de Patrimonio Cultural de la institución, Uriel Domínguez Contreras.
Hasta el próximo primero de diciembre, los asistentes a este evento podrán acceder a conferencias magistrales y conversatorios, así como a experiencias sonoras gastronómicas que se realizarán en restaurantes patrocinadores del evento.
“El Primer Festival Internacional de Conciencia Sonora contempla en su programa de actividades un recorrido por la ciudad de Toluca, a través del cual los participantes podrán reconocer diferentes dimensiones sonoras que se producen en el espacio urbano”.
También se ofrecerán talleres para explorar diversos sonidos relacionados con la imagen y el cuerpo, indicó el organizador del Festival y profesor de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la UAEM, José Alberto Cid.
Por su parte, el compositor, investigador y profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México, Otto Castro, expresó que este encuentro abre un espacio para el diálogo entre las instituciones educativas y acercar a la comunidad universitaria y público en general a diferentes experiencias sonoras.
Al impartir la conferencia “Políticas de la escucha”, el integrante de escuchatorio.net, Éric Flores, destacó que este espacio cibernético, que reposiciona al escucha como ente político, recibe archivos sonoros y los transmite a través de diversos canales.
