IMPULSO/Mtro. Marco A. Rodríguez Blásquez *
Reflexiones sobre el decálogo de Del Mazo
Cifras recientes del INEGI sobre la percepción de inseguridad, así como datos aportados por el Observatorio Nacional y los del Sistema Nacional de Seguridad Pública, califican al Estado de México como la entidad de la República con mayores delitos que van desde el crimen organizado, asaltos al transporte público, a casas habitación y en la vía pública. Obtuvo la calificación más alta en homicidios. A unos meses de dejar la administración, el exgobernador Eruviel Avila mencionó que “es un problema típico y temporal”, por lo que se reforzará el envío de policías estatales y se capacitaría a los municipales.
Ante esta ola delincuencial, el gobernador Del Mazo Maza presentó su decálogo de acciones contra la inseguridad, reafirmando así el compromiso que asumió durante su campaña política. El anuncio lo hizo ante la presencia del Secretario de Gobernación, los titulares de las fuerzas armadas y miembros de su Gabinete. El éxito del decálogo dependerá del compromiso en la ejecución de cada una de las acciones y la coordinación que se dé entre las diferentes autoridades de los tres niveles de gobierno.
El reto del gobernante mexiquense es disminuir los delitos que a diario se cometen, no esperando a que éstos se lleven a cabo y actuar de manera reactiva, es necesario aplicar estrategias de prevención, tomando en cuenta para su ejecución el lugar donde se den los delitos, es decir, no es lo mismo confrontar a grupos delincuenciales del sur del estado como los Rojos o los Guerreros Unidos, a aquellas bandas dedicadas al robo de transporte, narcomenudeo, robo de vehículos, en municipios metropolitanos.
A manera de aportación, expongo algunas sugerencias:
1.- Actualizar y aplicar con todo rigor el mapa delincuencial, mediante el cual es factible prevenir el delito. Las áreas de seguridad pública estatal tienen la obligación de registrar los municipios con mayor incidencia de delitos, los horarios en que se cometen y los líderes de los delincuentes que los perpetran. Servidores públicos de la Fiscalía General del Estado han estado recabando información de propietarios de diferentes giros comerciales y de servicios, con lo que se fortalece el mapa delincuencial. Con información de inteligencia, se detuvo a las bandas que atracaban el transporte ferroviario durante su paso por estados del centro del país.
2.- Reforzar la coordinación entre los distintos niveles de gobierno que participan en los operativos. Evitar proporcionar cifras engañosas, no es posible que, contando con información de inteligencia, se incremente el robo en microbuses, este tema, de ser atacado, contribuiría a modificar la percepción social de que la autoridad no hace nada o es omisa. Esta medida generaría una imagen positiva para el actual gobierno estatal que bien podría capitalizarse para el 2018. Baste contestar cuántos microbuses son asaltados por día, cuántos pasajeros viajan en este transporte que es el más utilizado en zonas populares, de dónde proviene el mayor voto a favor de los partidos de izquierda. Esta medida vendría a beneficiar a un número considerables de ciudadanos que se sentirían protegidos por su gobierno, por un dirigente que se solidariza y que está cumpliendo con lo prometido en su campaña.
3.- Esta cruzada que encabeza el Gobernador debe permear todos los niveles incluyendo el municipal. Aquí una reflexión: La narrativa del Gobierno federal es que la estrategia fallida para enfrentar a la delincuencia organizada fue por la falta de compromiso de los gobernadores y de los alcaldes. Del Mazo deberá tener una mayor cercanía con los presidentes municipales, evaluar con detenimiento la fama pública, perfil profesional y compromiso con el gobierno de los mandos municipales de seguridad pública.
* Director de BGC Consultoría Estratégica