Diciembre 24, 2024
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Horizonte mexiquense

IMPULSO/ Luis Miguel Loaiza
PAN-PRD, epidemia por venir

El desencajado y poco creíble trabajo del PAN en la entidad mexiquense se ve rodeado ahora de un nuevo virus que amenaza con acabar con la poca ideología que queda de sus fundadores, el otrora partido burgués que supuestamente representaba a la clase media alta y alta, donde los empresarios tenían un foro político para destacar y que le hacía sombra con sus ideas de izquierda al hegemónico PRI quedó atrás y hoy más que nunca se demuestra que los partidos políticos hacen suya la frase de lograr “el poder por el poder” y “el fin justifica los medios”.
El próximo maridaje PAN-PRD, encaminado a diluir la tercera etapa del pejismo, entre otras cosas no ha sido bien recibido ni por los militantes del azul ni por los verdaderos perredistas, pues ellos saben primero que nada que es muy difícil conjuntar ideas de derecha y de izquierda a menos que deseen un vástago amorfo, pero eso es lo de menos, la comisión y encargo federal va en camino.
Hace unos días Victor Hugo Sondón, líder estatal de Acción Nacional orgulloso presumía a la mayor militancia en el país concentrada en el Estado de México, 22 mil afiliados que, dijo, son la base del nuevo PAN, así de pequeña es la visión del malquerido dirigente del partido en la entidad.
Víctor Hugo Sondón Saavedra, presidente del PAN estatal, al rendir su Primer Informe Anual de Actividades y Resultados ante el Consejo Estatal, invitó a los asistentes a su evento a meditar esa “necesaria” unión con la izquierda pues “es necesario reflexionar y dar el sí al Frente Ciudadano por México, porque en las últimas elecciones se ha comprobado que el PAN en alianza con otros institutos políticos asegura la victoria”.
Algo hay de cierto en sus palabras, el sistema no querrá permitir la ascensión de AMLO y el PRI se encuentra en declive, por lo que es necesaria una tercera opción, que bien manejada desde los pinos podría evitar que López Obrador lograra ganar la elección federal del próximo año.
El Revolucionario Institucional sabe que se puede dar el lujo de “prestar” temporalmente su cetro, aunque no el poder, pero tendrá que ser una operación demasiado riesgosa y de alta escuela.
Esa unión del agua con el aceite, bien manejada, le permitiría al frente amplio tener la posibilidad de ganar municipios que antes ya ganó uno u otro partido, casos concretos como el de Ecatepec, donde sin duda alguna el candidato sería Octavio Martínez Vargas por el frente azul-amarillo; en Coacalco la única opción viable es el ex panista Alejandro Gamiño palacios, etc, etc.
Las cuentas alegres le permiten a panistas y perredistas soñar con recuperar el corredor azul y la zona amarilla de 1997, pero no cuentan con que el reclamo social y las necesidades de la población de cada municipio son muy diferentes, si bien es cierto que hay un hastío en contra del partido que ha gobernado por más de 80 años al Estado de México, también lo es que el electorado atraviesa por un momento en el que ya no cree en las grandes instituciones partidistas, que busca otras opciones y ahora buscará en la imagen del candidato, más que en el partido una opción viable para sentar su esperanza.
En 1997 el andamiaje priista no pudo evitar que el efecto Cárdenas arrebatara una mayoría en las elecciones y fracasó también para evitar el efecto Fox, tres años después, fue ene se año cuando se instauró con mayor fuerza la división territorial y el PAN, por sí solo se quedó con los municipios más importantes, poblacionalmente hablando, desde Ecatepec, hasta Huixquilucan el color azul permeó y el PRD, sin alianzas gobernó desde Acolman hasta los rincones más alejados de zona oriente. Sus desaciertos fueron restando triunfos y en 2003 el PRI tuvo una recuperación momentánea, pero no definitiva y en 2006 volvió a perder el gobierno federal, aunque esta vez no ocurrió lo mismo a nivel local, es decir, no hubo el arrastre de los fenómenos anteriores, pues AMLO se convertía en fenómeno pero no alcanzó para ganar todo lo logrado por el PAN seis años antes.

DATO:
Hoy, el PAN se encuentra en un verdadera disyuntiva, apostar todas sus acciones en ese frente amplio o quedarse a dormir el sueño de los justos, no hay más luego de que Morena le ha ganado el escaño segundo o tercero en la mayoría de los municipios mexiquenses.

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