IMPULSO/Ana Lilia Herrera Anzaldo
Reconocimiento y retos
En los últimos años el Senado de la República ha sido protagonista indiscutible de muchas transformaciones en nuestro país, confirmándose la actual Legislatura en funciones, junto con la anterior (LXII y LXIII), como las más productivas en su historia.
Tras una numerosa productividad legislativa esta Cámara ha visto nacer reformas de largo alcance para responder a un urgente clamor social, como la transparencia en el uso de recursos. La representación federal del Poder Legislativo confirma con resultados la eficacia en la aplicación de la norma en materia de rendición de cuentas y transparencia.
Así lo acredita el reconocimiento que el Instituto Nacional de Acceso a la Transparencia y Protección de Datos Personales (Inai) otorgó al Senado por haber obtenido una puntuación de 96.03 por ciento en el cumplimiento de sus obligaciones en la materia, convirtiéndola en uno de los cerca de 800 sujetos obligados en alcanzar el mayor puntaje preliminar, en el proceso de verificación de la información publicada en el Sistema de Portales de Obligaciones de Transparencia (Sipot), de la Plataforma de Nacional de Transparencia.
Hoy el modelo establecido en el Senado sienta un precedente de gran calado social, al demostrar la efectividad de controles constitucionales y legales para que ciudadanos y medios de comunicación conozcan a detalle el destino de los recursos públicos bajo los principios de máxima publicidad y eficacia en el gasto.
Fortalecer las instituciones pasa necesariamente por determinaciones transversales que coloquen en el centro al ciudadano, pues como en todo Estado que se precie de ser democrático, se debe propiciar una mayor participación ciudadana en la toma de decisiones públicas.
Nuestra Carta Magna consagra ese derecho en el artículo sexto y no es otra cosa que el derecho de todo gobernado para tener acceso a la información pública en forma oportuna y certera, en poder de las instituciones de Estado, sin la necesidad de explicar el motivo, causa o fin de la información solicitada.
Y aunque hay quienes optan por ver siempre inconvenientes, la realidad y los hechos nos dan la razón de que estamos en la ruta jurídica correcta, encaminada a prestigiar el quehacer de la política. El compromiso con la sociedad es ineludible; y hoy el ejercicio de la transparencia y la rendición de cuentas confirman que el propósito de la Cámara de Senadores es también otorgar al ciudadano un poder de fiscalización que sea la regla y no la excepción.
Mi reconocimiento al senador Pablo Escudero Morales quien, con una altísima responsabilidad republicana e institucional, imprimió a la Cámara de Senadores un carácter plural para la tolerancia, la construcción de acuerdos y el respeto a las discrepancias, privilegiado en todo momento la toma de decisiones democráticas en aras del interés nacional.
Twitter: @AnaLiliaHerrera