IMPULSO/Carlos Ravelo Galindo
Un atisbo de esperanza
Acabamos de leer “Los miedos” de la escritora Teresa Gurza. Todos sus ejemplos, de veracidad sin duda, nos aterran. Porque dejamos, a los que dicen gobernar, ponerlos en práctica.
Es cierto, como ella lo expone, que el problema más grande que tenemos que superar, es el miedo. Los miedos, en plural, en la vida del pueblo, son graves. Nos dice.
Debemos reconocer, sin embargo, que algunas cosas en la vida son más valiosas de lo que pensamos que son.
Por ejemplo las maravillas que nos ofrece la naturaleza y que van más allá de nuestro propio asombro: el mar, las montañas, el cielo ilimitado y las nubes.
Luego están los sentimientos y emociones que dan forma a nuestras vidas y bienestar.
Algunos pueden ser positivos. Otros negativos.
Pero, en última instancia, todos ellos forman parte de la realidad de nuestra existencia. Por eso debemos mencionarlos.
Y como apuntamos al principio son:
LAESPERANZA. UN ATISBO. Lo más valioso que tenemos con nosotros. LA LENGUA. Herramienta más valiosa para comunicarnos. YO PUEDO. Dos palabras más potentes. ORACION. La comunicación más poderosa. LA FE. Nuestra posesión más preciada. AUTOCOMPASION. La emoción más inútil. AUTOESTIMA. La posesión más preciada. ENTUSIASMO. El más contagioso de los espíritus.
LA SONRISA. El adorno más hermoso. LIDERES DEDICADOS. Las especies más amenazadas. LA JUVENTUD. El recurso natural más grande.
VALENTIA. Nuestra mejor cualidad. TRANQUILIDAD El medicamento más efectivo para dormir. EXCUSA. La enfermedad más incapacitante. EL AMOR. La fuerza más poderosa de la vida. LA MENTE. El más increíble de los computadores. AYUDAR AL PROJIMO. El trabajo más satisfactorio. Aseguramos que estas palabras dicen verdad.
Pero como advierte doña teresa, el problema más grande que tenemos que superar, es EL MIEDO. “Los Miedos”, dice ella en su comentario que compartimos, con permiso de ella:
“Miedos” de Teresa Gurza.
“A todos los miedos que ya teníamos los mexicanos:
Miedo a la muerte, a la vejez, a morir entubados, a perder independencia personal y a no poder valernos por nosotros mismos.
Miedo a no saber si nuestros seres queridos regresarán con vida, cuando salen de la casa a trabajos o escuelas.
Miedo a la inseguridad y a que familiares y amigos tengan que enfrentar una muerte violenta como ha pasado a tantos conocidos; o a ser balaceados sin qué ni porqué, en alguna carretera; como sucedió este miércoles, a una familia de Monterrey en el puente Pharr de la vía internacional a Reynosa”. [email protected]