- El Estado de México produce 15 toneladas de basura al día y no se tienen suficientes rellenos sanitarios para su tratamiento
IMPULSO/Patricia López Vences
Toluca
Cada año, 41 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos se generan en México, se estima que 86 por ciento son recolectados, 14 por ciento queda disperso o se arroja clandestinamente sobre camellones, baldíos, áreas verdes, banquetas; la cifra en territorio mexiquense es de 15 mil toneladas diarias de basura, de éstas, 67.81 por ciento son depositadas en rellenos sanitarios que opera el sector público y algunas empresas particulares.
En las últimas cuatro décadas, la generación por habitante de residuos sólidos urbanos se incrementó en 200 por ciento, resaltó María Salgado Ramírez, investigadora del Instituto Nacional de Ecología, al advertir que existen 200 sitios controlados que equivocadamente se les llama “rellenos sanitarios”, y pocos cumplen con la norma en construcción y requisitos exigidos para funcionar como rellenos sanitarios.
El INE cuenta con un padrón de rellenos sanitarios con un registro de 650, son tiraderos a cielo abierto, ocasionando problemas de contaminación del agua, aire y suelo, y riesgos en materia de salud pública provocados por la fauna nociva y gases tóxicos que la mezcla de residuos situación que genera déficit de 92% en la cobertura para la gestión de los residuos mediante sitios sostenibles que eviten pasivos ambientales, dijo.
México procesa al año únicamente el siete por ciento de los residuos peligrosos que genera, pues no cuenta con la tecnología adecuada para tratar o eliminar adecuadamente dichos desechos, destacó.
En 112 ciudades y municipios con más de cien mil habitantes, aproximadamente 50 carecen de “rellenos sanitarios” y su promedio de eficiencia en el manejo de la basura oscila entre 10 y 20 por ciento, advirtió.
La especialista en el tema advirtió que el problema de los residuos tiene sus orígenes en la excesiva generación que rebasa la capacidad de los municipios para recolectar y manejar adecuadamente los residuos y, en el inadecuado manejo de los mismos, a través de tecnologías contaminantes o tecnologías adecuadas, pero mal aplicadas para su tratamiento.
Desafortunadamente, al no atender los puntos mencionados, se tienen implicaciones ambientales serias como la contaminación de cuerpos de agua y de suelo; cabe resaltar que una tonelada de basura contiene una carga orgánica de contaminantes equivalente a las aguas negras generadas por cinco mil personas y produce al menos 280 metros cúbicos de gases de efecto invernadero.
