IMPULSO/ Agencia SUN
San Cristóbal de las Casas, Chis.
Integrantes de la Organización Campesina Emiliano Zapata, Región Carranza (OCEZ -RC), levantaron esta tarde de viernes, el plantón que mantenían en la Plaza Catedral de San Cristóbal de las Casas, para sumarse y reforzar al grupo de familias de esa agrupación que ayer jueves retomaron a dos predios en los municipios de Venustiano Carranza y Las Rosas, de los cuales “habían sido desalojados”, informó el vocero de ese grupo Juan Sebastián Espinosa Arias.
Los 200 inconformes, que protestaban desde el pasado lunes en el centro de esa ciudad de los Altos de Chiapas, desmantelaron el campamento donde se resguardaban y se retiraron para respaldar a las 70 familias que ayer ocuparon el predio El Refugio, en Venustiano Carranza.
Otro grupo se dirigió al predio La Primavera, en el municipio de Las Rosas, ocupado por 50 familias.
“Levantamos el campamento, porque los compañeros que fueron desalojados hace dos meses decidieron emprender nuevas luchas y regresar a los predios de los cuales habían sido desalojados; vamos a reforzar en cada uno de los predios, y le decimos al gobierno que tomamos estas medidas porque no queremos ver morir ni sufrir a ningún compañero”, argumentó Espinosa Arias.
Al retirarse la manifestación, el entrevistado pidió al gobierno respeto a los acuerdos suscritos por predios en posesión y para las superficies que ayer fueron “tomadas nuevamente”, así como cese “al hostigamiento y la militarización” en sus zonas.
Y advirtió que si las autoridades federales y estatales volvieran a “reprimirlos reinstalarán sus protestas y manifestaciones”.
El portavoz campesino enfatizó que una de las peticiones fundamentales es “la inmediata regularización de esos predios en posesión y el respeto a la posesión de tierras y en vías de regularización de todos los grupos adheridos a la OCEZ-RC”.
El campamento de la Plaza Catedral fue montado a inicios de la semana para exigir el retorno de 200 familias desplazadas de tres municipios por diferentes conflictos agrarios, así como la adquisición de tierras presupuestadas en 500 millones de pesos.
Jonathan del Carmen González, el coordinador del movimiento, apuntó que las principales exigencias es el retorno seguro y garantizado de 200 familias desalojadas y desplazadas de los poblados Francisco Villa, Francisco Villa Las Rosas y Unión El Refugio, asentados en los municipios de Amatenango del Valle, Las Rosas y Venustiano Carranza.
Al igual que la compra de unas 581 hectáreas que mantienen en posesión desde 1995.
Manifestó que dirigentes de la organización se reunieron el pasado 3 de mayo con funcionarios estatales quienes se comprometieron a resolver el conflicto sin ningún resultado por ahora.
