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Venezuela
General Motors informó que las autoridades, de manera inesperada e ilegal, incautaron la planta y otros activos de la compañía, como vehículos.
La automotriz estadunidense General Motors (GM) anunció que cesará sus operaciones en Venezuela luego que las autoridades realizaron un “embargo judicial ilegal” de su planta y de algunos de sus activos en ese país sudamericano.
“GM anuncia el cese inmediato de sus operaciones en el país y garantiza (en la medida en que las autoridades lo permitan) el pago de los beneficios de separación de los trabajadores derivados de la terminación de las relaciones de trabajo por causas ajenas al control de las partes”, afirmó.
En un comunicado, la automotriz manifestó su rechazó enérgico a “las medidas arbitrarias” adoptadas por las autoridades venezolanas, y advirtió que tomará todas las acciones legales, dentro y fuera de Venezuela a fin de defender sus derechos.
“La compañía confía en que la justicia se cumplirá con el tiempo, y espera continuar liderando el mercado venezolano”, destacó.
Añadió que mientras continuará proporcionando servicio postventa y piezas para sus clientes a través de sus distribuidores.
El embargo sucedió el mismo día en que al menos tres personas que participaron en manifestaciones multitudinarias perdieron la vida.
La automotriz, que opera en Venezuela desde 1948, destacó que la incautación fue concedida y ejecutada “en total desprecio al derecho al debido proceso”, lo que ha causado “daños irreparables a la empresa”.
Aseguró que el daño fue causado también a sus dos mil 678 trabajadores, sus proveedores y sus 79 distribuidores, que a su vez cuentan con tres mil 900 empleados. MVS