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Italia
“Esto no es amor”, afirmó Gessica Notaro al quitarse el pañuelo que cubría su rostro, para mostrar públicamente a todos cómo quedó luego de que su ex pareja Jorge Edson Tavares le lanzara ácido en enero pasado.
La semana pasada, la modelo italiana dio su primera entrevista tras salir del hospital donde estuvo internada durante dos meses después del ataque y ahora participó en el show de Maurizio Costanzo, un popular programa de televisión de su país, al que acudió para dejar en evidencia la violencia de género de la que fue víctima.
Según han publicado varios medios italianos, la joven de 28 años llegó al programa con su rostro cubierto por un pañuelo. Sin embargo, cuando el conductor le dijo que podía quedarse así, ella replicó: “Prefiero quitármelo”. Y así lo hizo, en medio de un enorme aplauso del público asistente.
“Quiero que se vea lo que él me hizo. Esto no es amor”, les dijo valientemente a los televidentes, dejando en evidencia las cicatrices de su cara y un parche que le cubría el ojo izquierdo, el que también fue alcanzado por el ácido.
Asimismo, la modelo aseguró que asistiría a la audiencia en que su ex pareja será acusado de agresión. “No me importa encontrarme con él, él ya no es nada para mí. Pero quiero estar presente porque quiero que me vea, debe saber lo que hizo. Entonces me sentiré bien”, explicó.
Gessica reiteró lo que la semana pasada le relató al Daily Mail que Tavares era un novio modelo, que habían tenido una gran historia de amor, pero que de pronto él había comenzado a faltarle el respeto y a maltratarla, por lo que ella prefirió alejarse. En ese momento, el hombre se puso violento y empezó a amenazarla con destruirle la vida, lo que cumplió el 10 de enero pasado cuando le lanzó ácido en el momento en que ella se bajaba de su auto.
“Creo que estaba escondido detrás de otros autos. Debió arrastrarse por el suelo y gatear detrás de mí. En cuanto puse la cabeza afuera de la ventana lo vi venir hacia mí desde la parte trasera del auto y lanzarme el ácido”, recordó.
En 2007, Gessica fue finalista en Miss Italia, aunque prefirió dedicarse a su otra pasión: los animales. Así fue como conoció a Tavares mientras trabajaba en un acuario como adiestradora de delfines.
Sin embargo, ahora la modelo no podrá retomar su trabajo, ya que el cloro de las piscinas le haría mucho daño a su rostro desfigurado. Primerahora.com
