IMPULSO/ Agencia SUN
Ciudad de México
Vadhir Derbez vive entre México y Estados Unidos, pero él no tiene los mismos problemas de otros artistas con su situación legal porque es ciudadano americano.
“Temo todos los días”, dijo de broma. “No, nada que ver. No hay problema, puedo trabajar ahí y puedo vender truchas o verduras”, agregó.
De a poco ha empezado a picar piedra para seguir su sueño en el canto y la actuación por aquellas tierras, así como lo ha hecho su padre Eugenio Derbez. El joven aseguró sentirse orgulloso de lo que está haciendo toda su familia, pues cada uno aporta con proyectos distintos y que los caracterizan unos de otros.
En su caso, se vio en el espejo con su personaje en la película “3 idiotas” y lo primero que pensó fue en lo mucho que se parecía a Eugenio, en particular se identificó con su personaje de “Armando Hoyos”, pues tuvo que usar lentes y un peinado de “librito”.
“Fue un reto. Estaba acostumbrado a papeles en donde no me viera tan de la fregada, además de peinarme así me pusieron lunares, me dijeron ‘te vas a estar echando pedos durante toda la película y enfrente de la gente’. Me divertí mucho porque era un antagónico atípico, tiene un ego gigantesco y quiere ser el mejor pero es ñoño y teto, tiene malicia y trata de llevarse entre las patas a quien sea”.
Desde su punto de vista hoy en día, y gracias a las redes sociales, las relaciones interpersonales son desechables, por lo que le parece bueno ver en pantalla a tres amigos que se apoyan e impulsan. Ese es uno de los mensajes de la película dirigida por Carlos Bolado, que tiene un elenco conformado por Martha Higareda (que además de actuar es productora), Alfonso Dosal, Christian Vázquez, Germán Valdés, Sebastián Zurita y Rodrigo Murray.
“Para escoger proyectos tiene que ver con algo que me conecta con el corazón y pienso que en estos momentos tener un mensaje en este país para ser feliz y hacer lo que te gusta es poderoso, aquí uno de los principales mensajes es que si te lanzas sin miedo te van a salir bien las cosas aunque todos ellos tienen un pasado, una historia de mentira o algo escondido”, argumentó Dosal.
El filme, que se estrena el próximo 31 de marzo, fue adaptado de una producción exitosa de la India aunque para esta ocasión quisieron incluirle ejemplos mexicanos para que el público se sintiera identificado.
“La original duraba casi tres horas y tenía nueve escenas de baile, quisimos quedarnos con la esencia de seres humanos que creen y siguen su pasión. Hicimos un grupo en donde los actores improvisaron y jugaron; cada uno llegaba con una propuesta lo que nos hizo trabajar de una manera contemporánea y moderna”, finalizó el actor.
