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Niega ASBAR que vendan alcohol adulterado


IMPULSO/ Leonor Sánchez Sánchez
Toluca
Difícilmente un lugar de venta de bebidas alcohólicas, legalmente establecido, va adulterar lo que comercializa, señaló el presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes del Estado de México, Patricio González Suárez, quien dijo que un lugar formal no va arriesgar su prestigio o a que le clausuren el lugar por hacer eso.
Es de recordar que con motivo de las fiestas decembrinas, la Secretaría de Salud estatal, a través de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de México (Coprisem), lleva a cabo el “Programa de prevención de venta y consumo de alcohol adulterado”, con lo que a la fecha, ha verificado 400 establecimientos sin que hasta el momento se hayan detectado anomalías en este tipo de productos.
Para evitar cualquier problema que pudiera derivar de la calidad de las bebidas que se venden, afirmó que recomienda a sus agremiados comprar sus insumos en tiendas reconocidas y formalmente establecidas donde les expidan la factura correspondiente, con la finalidad de evitar que, sin saberlo, puedan comprar alcohol adulterado.
Asimismo recordó que es obligación de cualquier establecimiento con venta de bebidas alcohólicas destruir las botellas que ya se han consumido, y llevar una bitácora, para evitar que esa botella pueda ser reutilizada.
González Suárez explicó que se pueden dar dos casos de adulteración de las bebidas: una en la que utilizan metanol en la preparación de la bebida poniendo en riesgo la salud del consumidor; y otra que consiste en rellenar botellas con bebidas de menor calidad.
En ambos casos, de encontrarse alguna de las situaciones referidas algún establecimiento, implicaría el aseguramiento del producto, multa con 16 mil veces el salario mínimo vigente o unidad de medida, y la clausura del lugar.
De acuerdo al artículo 2422 de la Ley general de Salud, el monto de la infracción se calcula dependiendo los daños que se puedan producir en las personas, la gravedad de la infracción, las condiciones socioeconómicas del infractor y si existe reincidencia.
El líder empresarial comentó que para el consumidor es fácil saber si la bebida está adulterada, ya que el sabor no es el mismo, regularmente sabe más a alcohol y en la primer copa puede empezar a sentir mareo, dolor de cabeza, náuseas, vomito, ansiedad, nerviosismo y ceguera, si hay.
Si hay duda del producto, el consumidor está en su derecho de pedir que le sirvan la bebida en la mesa para revisar que no esté violado el sello de la botella, así como también puede escanear el código QR que deben de traer todas las botellas, el cual redirecciona a una página del SAT donde viene especificado todo sobre esa bebida.
En el caso de que se utilice el metanol o alcohol metílico, el consumo puede ser fatal, ya que esta sustancia no es apta para el consumo humano, afecta principalmente el sistema nervioso central, destruyendo la mielina (tejido que recubre a los nervios) evitando que estos se comuniquen y disminuyendo funciones como el movimiento.
: En el caso de que se utilice el metanol o alcohol metílico, el consumo puede ser fatal, ya que esta sustancia no es apta para el consumo humano
: Si hay duda del producto, el consumidor está en su derecho de pedir que le sirvan la bebida en la mesa para revisar que no esté violado el sello de la botella, así como también puede escanear el código QR que deben de traer todas las botellas